dicen que el tiempo guarda en sus
las cosas que el hombre olvidó.
Lo que nadie escribió,
aquello que la historia nunca presintió.
Y vuelan las gaviotas a la tierra,
trayendo la vida que han robado al mar.
¿A quién le importará
que las gaviotas vuelen la historia del mar?
Guarda el tiempo en las pastillas unas
cuantas semillas que entrega una canción.
Pero hay un lugar donde el olvido floreció.
Guarda en polvo las pastillas el tiempo unas semillas,
quizás una canción.
Pero ¿quién guardará las cosas que no son de Dios?
Y buscan las hormigas por la tierra,
migas, migas, migas hasta hacer un pan.
¿A quién le importará que las hormigas miguen su propia verdad?
Y nace mi canción desde el cemento,
una flor que en el desierto morirá.
O el canto de un sorsal se perderá en el ruido de la gran ciudad.
Guarda el tiempo en las pastillas unas
cuantas semillas que entrega una canción.
Pero hay un lugar donde el olvido floreció.
Guarda en polvo las pastillas el tiempo unas semillas,
quizás una canción.
Pero ¿quién guardará las cosas que no son de Dios?
Guarda en polvo las pastillas el tiempo unas semillas,
quizás una canción.
Pero ¿quién guardará las cosas que no son de Dios?